Durante la mañana de hoy se ha celebrado el I Comité regional UGT Aragón, máximo órgano del sindicato entre Congresos en el Centro escolar Pignatelli donde se ha aprobado por unanimidad una Resolución en la que se hace referencia al actual contexto social y económico de inestabilidad que amenaza la recuperación económica, unido a la crisis sanitaria no resuelta. El Comité ha valorado el abandono de las políticas de austeridad y la disposición de fondos europeos y ha analizado los retos del Gobierno de España pendientes para modernizar la economía y fortalecer los servicios públicos.

A nivel regional, el Comité apoya al Gobierno de Aragón en la consecución de una financiación autonómica más justa y reivindica la participación en el Diálogo social para la planificación y la gestión de los fondos europeos en la región. También ha puesto en valor esta herramienta en el ámbito nacional a lo largo de toda la pandemia y para alcanzar acuerdos en materia de Seguridad Social y reforma de las pensiones; de contratación y negociación colectiva en la reforma laboral y en el incremento del SMI. También traslada su preocupación ante la escalada de subida de precios y defiende la necesidad de la negociación colectiva para tirar al alza de los salarios.

El I Comité ordinario de UGT Aragón ha alertado de que las alteraciones en las cadenas de suministros; el encarecimiento de materias primas, la energía y el transporte, etc. se unen al contexto de inestabilidad que amenaza la recuperación económica, sin que se hayan resuelto la crisis sanitaria

Valora que la respuesta europea frente a la crisis haya sido de abandono de las políticas de austeridad; un camino que es favorable en la lucha contra el cambio climático, la digitalización y el fortalecimiento de la resistencia comunitaria frente a las crisis.

Con los presupuestos para 2022, considera que el Gobierno de España puede gestionar la financiación europea para modernizar la economía y fortalecer los servicios públicos, pero no tiene solo pendiente la aplicación de los fondos europeos, también la reforma fiscal progresista y un sistema de financiación de las comunidades autónomas

UGT Aragón apoya al Gobierno de Aragón en la reivindicación de una financiación más justa, pero añade que se deben garantizar las partidas necesarias para la prestación de servicios públicos de calidad, y solo se consigue con un sistema fiscal más progresivo. El sistema ha de garantizar además que se financia el coste real de la prestación de los servicios, atendiendo a factores la dispersión territorial, la despoblación o el envejecimiento. Se debe atender al principio de lealtad institucional, impidiendo de un lado las cargas adicionales sin financiación correspondiente y, de otro, el dumping fiscal.

Los fondos europeos de reconstrucción deben ser también una oportunidad para Aragón. UGT Aragón reivindica que el diálogo social participe en la planificación y gestión de esos fondos, atendiendo a la creación de empleo de calidad. Además, la puesta en marcha de otros proyectos obliga a una labor de prospección sobre el futuro del mercado de trabajo ligado a una modernización y adecuación del sistema educativo. La apuesta por el fortalecimiento del tejido industrial requiere la formación de profesionales de todos los niveles. Los fondos deben servir  también en Aragón para reequilibrar el territorio.

El diálogo social en Aragón debe además abarcar materias competencia de la mayoría de los departamentos del Gobierno de Aragón, y apostar por la creación de un marco de relaciones laborales diseñado bilateralmente por organizaciones empresariales y sindicales y apoyado, también financieramente, por la administración autonómica.

El diálogo social en el ámbito nacional ha dado importantes frutos en los últimos meses y destaca la actividad negociadora a lo largo de toda la pandemia. Ha logrado darle la vuelta a la agresión sufrida por el sistema de seguridad social durante el mandato del Partido popular. Se ha derogado el índice de revalorización y se ha librado al sistema de cargas impropias.

El acuerdo sobre contratación y negociación colectiva ha venido a cumplir dos objetivos: reformar algunos de los desequilibrios introducidos en la negociación colectiva por la reforma laboral de 2012 y cumplir con uno de los compromisos de España para el acceso a los fondos “next generation”; reformar la contratación. Tres han sido los grandes logros de este acuerdo; reformar la contratación para terminar con la excesiva precariedad; la introducción de cambios en la negociación colectiva, restableciendo la ultraactividad de los convenios, dando prioridad al convenio sectorial sobre los convenios de empresa en materia salarial y obligando a la aplicación del convenio sectorial en la subcontratación. Por último, se ha establecido un sistema de preservación del empleo durante las crisis que prolongará la aplicación del mecanismo de los expedientes de regulación temporal.

El acuerdo laboral es positivo en sus contenidos, pero no agota nuestra reivindicación de derogación de las reformas laborales. El hecho de que haya sido alcanzado en la mesa de negociación y avalado por todas las partes le da un valor especial, que no debería devaluarse mediante la su alteración del acuerdo en la tramitación parlamentaria.

Otro aspecto positivo, otro resultado del diálogo social, es el incremento del salario mínimo interprofesional y el objetivo declarado de alcanzar en esta legislatura su establecimiento en el sesenta por ciento del salario medio, como marca la Carta Social europea.

Sin embargo preocupa, el actual contexto de crecimiento de los precios amenaza precisamente el poder adquisitivo de los trabajadores y las trabajadoras, por lo que se hace necesario que la negociación colectiva tire al alza de los salarios.

Con el impulso de la Confederación y en colaboración con las federaciones, UGT Aragón promoverá en las próximas semanas campañas informativas a los trabajadores tanto de los contenidos de los acuerdos alcanzados como de la necesidad de fortalecer la negociación colectiva.

Resolución I Comité Regional Ordinario